
O de un chef de raza en París.

O de un chef de raza en París.

¡Más tres estrellas que nunca!

O de un restaurante como la copa de un pino.

O de inteligencia natural.

O de un cóctel vasco-andaluz.

O de dos italianos en NY.

O de una cocina de agárrate que vienen curvas.

O de un restaurante que es purita dinamita.
