Esta compañía vitivinícola lleva desde 1678 dedicándose al negocio del vino, así que vieron pasar carros y carretas y la de dios es cristo ante las cancelas de todas las haciendas que tienen desperdigadas por el país, pues embotellan vinos de toda suerte y condición, blancos, tintos y Oportos encabezados.
Este tinto colosal está dedicado a la memoria del marqués de Soveral, un aristócrata nacido al pie de un viñedo en el Douro, más concretamente en São João da Pesqueira. El muy gañán se convirtió en el diplomático más famoso del país y se hizo colega del mismísimo Príncipe de Gales, que lo invitó a su propia coronación como Eduardo VII en la Abadía de Westminster, ¡menuda farra!
Así que los imagino en pleno fregado, con las botellas en la mano y un pedo del quince y medio, brindando por lo divino y lo humano con viejas añadas embotelladas de este brebaje cocinado con una cuidada selección de Touriga nacional y Cabernet Sauvignon.
Si lo pillan, bébanselo con un tarugo de queso o una buena morcilla cocida de puerro y cebolla, con su picante, ¡mantengan con vida su almorrana!
www.realcompanhiavelha.pt