O de un vino parido por un burgalés que dios tenga en su gloria.
18 de abril, 2017, 08:00
O de un vino parido por un burgalés que dios tenga en su gloria.
O de una tasca coruñesa para gozar como pigmeos.
O de un queso de primera división.
O de unas patatas sabrosas a más no poder.
O de unas conservas de las que no quedaran ni las migas.