El vino que hoy nos ocupa está elaborado con la variedad Tempranillo procedente de una parcela bien hermosa en Coruña del Conde, ubicada a casi mil metros de altitud. Lo tienen doce meses criando en barrica de roble francés y una vez abierto y en la copa, ¡menudo momentazo!, atesora un precioso color rubí que si lo pillara el amigo Claudio Munoa, se hacía un precioso solitario con él.
Cuando se lo chupen gozarán con toda una macedonia de frutas rojas, moras, grosellas, ciruelas gordas y ese pellizco de la vainilla, la canela y el chocolate. La ficha de cata de bodega aconseja servirlo con cocido, legumbres, migas, caza mayor, carnes rojas, asados castellanos y quesos curados, y no tenemos nada más que añadir que una siesta reparadora. Amén, Jesús.
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Precio aprox.: 18 euros