O de un tipo de Jarandilla de la Vera que cocina y vive a lo ancho, con dos pelotas.
¿Un placer compartido?
La pasión y el placer de cocinar y dar de comer. Ojalá pudiera hacerlo para todas las personas del mundo: “es un sueño acabar con el hambre en el mundo”.
¿Un placer de tu niñez?
Los recuerdos y los amigos.
¿Un olor placentero?
El que desprende una panadería con horno de leña.
¿Un placer egoísta?
No sabría decirte…
¿Un placer para tu oído?
El silencio. Camarón. La guitarra de Paco de Lucía. Paraíso Express.
¿Un placer para tus ojos?
Noa. Un placer que me llena el alma.
¿Un placer carnal?
Natalia. Carnal y mucho más. Es un pilar muy importante en mi vida.
¿Un placer desconocido?
No lo conozco.
¿Un placer del gusto?
Lo sencillo. El sabor.
¿Un placer anacrónico?
La necesidad de estar con muchas personas queridas.
¿Un placer que no cueste dinero?
La necesidad de estar solo.
¿Un placer del que avergonzarte?
No me avergüenzo de nada.
¿Un placer fuera de tu alcance?
El tiempo libre. Tiempo para hacer otras cosas que considero muy importantes y que este maravilloso oficio, junto con mi mala organización, no me permiten.
¿Un placer irrenunciable?
Pensar. El buen café. Un vino de Jerez.
¿Un placer sobreestimado?
Los ritos y culturas asiáticas aquí. Creo más en lo nuestro donde encuentro lo mismo o más, con mi identidad.
¿Un placer golfo y confesable?
Cenar con mis amigos y estar de risas hasta que amanezca. Hablar de lo divino y de lo humano, para no llegar a ninguna conclusión.
¿Quién es Quique Dacosta?
Nacido en Jarandilla de la Vera 1972. Afincado en Denia, Costa Blanca, Comunidad Valenciana, desde 1986. Mismo año en que entra en una cocina por primera vez, aunque no fue a cocinar si no a fregar platos, cazuelas y copas. De familia humilde de origen rural. Emigrantes como norma en las dos partes de su familia (por parte de padre en Alemania, por parte de madre en Cataluña) y él al levante español. Cocinero de oficio, pasión y convicción. Persona que trata de no defraudar a nadie. Amigo de sus amigos hasta la muerte. La familia es lo más importante junto con ellos. Me emociono con el éxito de los españoles, aquí y en el mundo. Grité y salté como un loco cuando España ganó la Eurocopa. Prometo hacerlo otra vez en el mundial. Tengo un sueño: acabar con el hambre en el mundo.
¡Grande!
Un mestre!!!!!
Y con un sentido del humor un «poco cabrón» (con todo el cariño). A ver si llega la tercera.
Admiración por la entrevista, el entrevistado/r y las respuestas… sobre toda, al del placer sobreestimado.
Felicidades, sin más (ni menos). A los dos.
Felicidades al Pollo .(Un abrazo quique )
¡Hostia! ¡Cuánto buen rollito por aquí!
A Quique, capaz de hacer platos emocionantes, hay que pedirle más, mucho más. Su cocina, si consigue la regularidad, es de 3 estrellas. Ánimo y a por ellas. Salud!
Flamante conducción de quien este blog escribe que nos adentra al alma y espíritu de un artifice de sabores como lo es Quique Dacosta.
La gallina está acojonada, sabe lo que le va a venir encima
Pues lo cierto, no es que haya estado en muchos restaurante de estrellas, pero al último que fui, fue al de Quique Dacosta, y debo decir que no me gustó.
No repetiría, como sí lo haría con Carme Ruscalleda o con Sergi Arola.
Sus platos fueron todos muy fríos (y hablo de temperatura) incluso los pocos calientes que sirvieron estaban templados, muy marineros (nada de carne en el menú degustación) y con sabores, en algunos de ellos, poco acertados.
Lo siento, fue mi impresión y por tanto es mi opinión.