O de unas papas claritas, finas y crujientes.
Sabrán de sobra que somos de la liga de la patata frita, este tubérculo sideral nos sulibella en todas sus formas posibles. De vez en cuando nos llega alguna nueva bolsa que hace que ansiemos abrir una birra a toda pastilla y mandar a freír espárragos el mundo, aunque nos solemos limitar a la ingesta de la cerveza, así están las cosas.
Estas, en concreto, son valencianas, amarillas claritas, finas y crujientes, la clásica patata frita de toda la vida, que parte de una papa de buena calidad y que cuando te la metes en la boca te retrotrae a la época en la que eras un moco de pantalón corto que manchaba sus zapatos con el serrín de los tascos de siempre, ¡ay, qué tiempos Marivi!
Los orígenes de las Papas Lolita se remontan a 1935 cuando un joven José Escrivá decidió entrar en el negocio de los aperitivos instalando en el pueblo de Bellreguard un puesto con una simple freidora como maquinaria y con patatas, aceite y sal como ingredientes únicos, para crear una fritura que envolvía con un cucurucho de papel y entregaba a los tortolitos que decidían hacerse arrumacos en el cine.
Fíjense lo que ha llovido y cambiado el asunto, pero estas patatas fritas tienen aún esa impronta viejuna y entrañable de cuando las cosas eran de otra manera, sin tanta tecnología y gilipollez como la que impera hoy en día.
Papas Lolita
C/ Carril nº 4 Polígono Industrial
Beniflà 46.722 Valencia
Teléfono: (34) 96 281 52 39 / 96 280 01 81
Página Web: http://www.papaslolita.es
Email: papaslolita@papaslolita.es
Papas Lolita 250 g P.V.P.: 1 € – 1,25 €
Boníssimes.
Aquí una curiosidad:
http://dule.es/productos-gastronomia/papas-lolita-realidad-o-mito