Don Producto y tú

O de un restaurante que rinde pleitesía especial a las carnes y a la materia prima de primera.

No hay el producto de calidad para disfrutar de esa cocina casera que no tiene rival.

Al Capone vestía como un figurín y adoraba la buena jamada más que un tonto un lapicero, así que estando preso en Alcatraz escribió en una de sus cartas algo que es perogrullada, “no hay como los productos de calidad para disfrutar de esa cocina casera y sencilla de la nonna que no tiene rival”; Conforme, pensarán ustedes, así que cambien nonna por extekoandre o lo que toque en su comarca, y todo pichichi asentirá sin rechistar. Amen. El problema llega cuando el producto verdaderamente fetén, por innumerables razones que sería imposible resumir aquí, empieza a ser tan difícil de encontrar como el Arca de la Alianza de Indiana Jones. La “chi-cha” o el “pro-duc-to”, dicho bien alto y a golpe de corneta, son los palabros que más pronuncian los hosteleros de cualquier pelaje y condición, pues todo “pichipata” presume de materia prima escogida, seleccionada, primigenia y diez mil zarandajas más que rara vez se corresponden con la realidad y que una vez en el gaznate se deshacen sin pena ni gloria como triste sacarina en un café descafeinado. ¡Tiempos convulsos y modernos estos que nos toca vivir, repletos de quesos plastificados, galletas fofas, bebidas que son pura ponzoña y toda una artillería de vulgar manduca que de tan gato ya no recuerda uno ni a la liebre!

A pesar del panorama, si el vicio les corre por la vena a pleno chorrazo, nunca pierdan la esperanza y husmeen en todo rincón honesto con el objetivo de reconciliarse con el mundo y con las golosinas que nos puede ofrecer. De tal forma, guiados por ese espíritu nació en julio de 2011 Don Producto y tú, situado en uno de los nuevos barrios de Gasteiz, un local que rinde pleitesía especial a las carnes y a la materia prima auténtica y de primera. Los socios fundadores hartos de no encontrar el garito que les permitiese comer como príncipes, decidieron montar el suyo propio, así que dicho y hecho, aquí tienen un local de arquitectura moderna, amplio y perfectamente ideado, convertido en lugar de encuentro y disfrute entorno a la mesa.

En esta casa el asunto cárnico se lleva la palma. Las chuletas de vacuno a la brasa, cocinadas con las soberbias técnicas de asado de Matías Gorrotxategi & family, que se encargan de la tutela del establecimiento, son auténtico timbre de gloria del lugar; Tanto como el ojo de bife, corte argentino del lomo alto de la cinta, servido sin hueso y poca grasa, o la hamburguesa o un plato homenaje a Peter Luger, que capta la esencia del afamado asador de Nueva York.

Antes de morder músculo, pueden elegir cualquiera de los picoteos más solicitados, un poco de jamón ibérico de Guijuelo, unas extraordinarias anchoas cantabronas en salazón elaboradas de forma tradicional y acompañadas de tomate dulce, o el steak tartare, cuidadosamente sazonado, que puede guarnecerse con unas ostritas recién abiertas o un delicado tataki de atún, con su golpe de soja y el contrapunto de un picadillo de mango. Exhiben una colorista gama de ensaladas bien apetitosas, ricas verduras emparrilladas con alioli de azafrán y, por supuesto, los archifamosos pimientos confitados al estilo de Casa Julián de Tolosa, la golosina más encumbrada que podrán echarse al estómago.

Si aterrizan por allí uno de esos días en los que el grajo vuela bajo, déjense tentar por los platos de cuchara como la alubia pinta alavesa con todos sus sacramentos, pura perdición, la crema ligera de garbanzos con callos de bacalao o cualquier otra propuesta humeante que nunca falta en la carta. Hay además excelentes morcillas de Burgos a la brasa con el aderezo de una berza que le va como anillo al dedo, distintos bacalaos, callos o morros y casi todo lo que nos puede apetecer para comer sin bobadas y con los pies clavados al suelo.

Iván Bañez y su equipo también echan el resto en los postres y nunca falta una fina tarta de manzana y hojaldre, unas torrijas o un gustoso arroz con leche de los de siempre, con los que puede pecarse sin miramientos. Bien regado todo con una selección de vinos tope coherente y atractiva, podrán brindar por la vida, ¡levanten sus copas!… que nos quedan dos telediarios.

Don Producto y tú
Avda. de Zabalgana 1, (Rotonda de la Antonia)
Vitoria-Gasteiz
Tél.: 945 35 80 01
www.donproductoytu.com

COCINA Todos los públicos
AMBIENTE Modernito
¿CON QUIÉN? Con amigos / En familia
PRECIO 40 €