Aizpea Goenaga

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O de una mujer viva y aguda como un rayo de verano.

Es pura dinamita; cantidad de nitroglicerina y cuerpo, más que poroso, marchoso que no veas. Las tablas le vienen de casta, hija de actriz, tía de artista  consolidada, pertenece a una prole que no se baja de los escenarios ni a patadas. No hay salsa teatrera, televisiva o cinematográfica en la que no meta mano, con más salero que un ajoblanco bien rematado. Es de los pocos casos en los que el odioso término multidisciplinar le va como guante de la mismísima Hayworth.

El pasado 22 de mayo, se puso el mundo por montera y estrenó en los cines su primer largometraje, Sukalde Kontuak (Secretos de cocina), una comedia de enredo en la que consiguió colar a algunos de los santones de la cocina vasca en pleno cameo.

Quién si no ella para hablarnos de placeres, de los que, constatamos, sabe un rato.

¿Un placer compartido?

Jugar, pasear, ver una peli, charlar, viajar …

¿Un placer de tu niñez?

Escuchar cuentos arropada en la cama.

¿Un olor placentero?

El del mar, el del fuego, el de la hierba.

¿Un placer egoísta?

Será el que hace daño a otra persona. Pero no disfruto viendo sufrir a nadie.

¿Un placer para tu oído?

El silencio después de mucho ruido.

¿Un placer para tus ojos?

El mar.

¿Un placer carnal?

El que imaginas (con su doble sentido).

¿Un placer desconocido?

Volar.

¿Un placer del gusto?

Gustar.

¿Un placer anacrónico?

Saber.

¿Un placer que no cueste dinero?

Soñar.

¿Un placer del que avergonzarte?

Ay, no, no… que me avergüenzo.

¿Un placer fuera de tu alcance?

Todos los que hay que pagar más allá del alcance de mi cuenta.

¿Un placer irrenunciable?

Todos.

¿Un placer sobreestimado?

Cualquiera que esté descompensado, es decir, cuando sólo juega uno solo de los sentidos y donde no entran ni el afecto ni el amor.

¿Un placer golfo y confesable?

Mmm… si lo cuento pierde su “golfura”. Aunque un capricho puede ser desayunar en la cama, después de haber terminado la noche bailando. Pero ni me acuerdo la última vez que lo hice.

¿Quién es Aizpea Goenaga?

Ya preguntaré.

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